Poesía
TABIRON:
MEMORIAS DEL NO NACIDO
Por Ramina Herrera.
A Sonia Victoria, dulce ser
que se me presento en sueños
cuando tenía 16 años.
*
He visto el resplandor de su vientre joven,
la tensa caminata
retorcijones / abismos...
y también rocíos
pequeñas gotas de sangre y sal...
escuchaba en silencio jugar al aire en sus cabellos
la lluvia danzar en torno suyo
como danza un jilguero
embelesado en tardes de invierno.
Los latidos,
los latidos que golpeaban mi temprano cuerpo
acompañaron mi sutil andar por siderales campos
rojos campos...
transparentes campos...
extraños... extraños...
Cuanto sueño sentí en su seno
y el cobertor ligero me abrigaba eterno
biplánica estancia
que duró mil lapsos de tiempo
y el rocío de la aurora lo que dura un beso...
**
Esta luna me irradia diferente
parece que ha notado la nostalgia de mi fuente,
qué le digo ahora si no ha querido platicarme
si volvió el rostro al otro lado
al horizonte
cabizbaja y lúgubre cual luz de antaño
estrella que dio su ultimo relámpago
Remolinos suenan no muy lejos,
y mi corazón se estremece al estruendo de los rayos
me ciega la locura
la noche incierta que parece no acabarse nunca
mi barca se mueve
lenta, pero se mueve como aroma de lirio
como ruedas de molino.
***
El suspiro alisó el vaivén de sus latidos,
ahora duerme como yo
en las dunas
sempiterno de Dioses halcones rosas...
Muchos dirán: ya no dibuja una sonrisa,
solamente ven lo que aparenta su nívea mirada
mas nunca lo que su alma lleva
lo sutil de su agenda cavernas de quimera...
Lentamente se incorporó sobre sus rodillas
y el olor chamuscado de terceras generaciones
vino acompañado del mutis sigiloso
la noche deshizo su manto sobre su espalda desnuda tenue...
Estos son los campos de siempre
caminos angostos sinuosos arco iris refulgente
coral de textos apilados
líneas conexas inversas testimonios de amor
****
Este inmenso jarro me envuelve solidariamente
y su horizonte alcanza
hasta donde toca mi alma
y mi alma es grande eterna
que ha divisado mil veces
la huella de mis pasos
muchas piernas muchos zapatos
Suaves manos me acariciaron en antaño
y estancia tras estancia quise ser mas humano
discurrió la guerra laceraciones de miseria
el hambre tierra seca
lluvia de piedras
toneladas de agua
muchas vidas
muchas muertes
Heme aquí y ahora, soñando con un regreso
o regresando a un sueño
cantan a lo lejos un coro de sirenas
advierten: un loto florecido
será mi anunciamiento
partículas de rocío
muchas células etéreas
*****
Certera risa
nirvana en mediodía
se aperturaron los cielos
exhalaciones
millones de luceros
y en mis manos diminutas
todas
juntas
cayeron.
Aroma en mujer en rosa
te desplomaste desnuda sobre alba
sin mas estación que una primavera
atada a tus cabellos la luna
y a tu cintura 12 signos
12 casas que recorrí en un día
2 grados de tu vida.
******
Mil gaviotas volaron a mi cuerpo
muy cerca de Aries crepúsculo de invierno
subsecuentes nacimientos
torcazas
elefantes
bocanadas de fuego
truenos
7 ruedas engranadas
determinaron una carta con mis líneas
y yo pedí que te pusieran
como estación de mi éxodo
el inicio mi llegada
Pisis me ungió tranquilo
con aceite y flor de harina
heredé lo que quedó del día
canciones
poesía
el arte de vivir
que no llega todavía
*******
Pasto de nieve
dulce frío quemando mis venas
me recorre lento, como queriendo descubrir cada rincón / cúmulo de células
Cada día el cordón de plata se va extendiendo
solo quiero saber
si me está llevando
o me está trayendo.
La calma...
silencio nocturno
que me absorbe en sus plumas
me contrae me relaja
y sigo en su vaivén cual rama de olivo
surcando el cielo al compás del viento.
********
He querido cantar a tus oídos
lo que me nace de muy adentro
pétalos tiernos / calor de tu vientre
alisos dorados / tus manos frotándome
He querido sonreír a tus ojos
y decir que carne tuya soy
obra de tus células
mi arquitecta corporal
Hoy...
amanecí acunada en una nube /copo de algodón maternal
y desde este dromedario
vislumbro que todo fue un sueño
deseo llorar
pero lagrimas
no tengo
*********
Besitos de lluvia te cayeron por la tarde
cuando sentada advertías - bello lienzo espiritual
y las nubes medio grises - rosadas - azules
formaban serafines cardos jazmines
Esbozaste en silencio una sonrisa
porque tu alma sintió mi etérea presencia
y esas gotas eran mis caricias
que discurrían lentas - tus mejillas
**********
Haz visto en lontananza lo que guarda mi memoria
mil enredos de tardes y constelaciones visitadas
Febrero lluvioso - frío,
Orión distante - melancólico
y aquellas olas que penden de un hilo.
Tu revelación ha menguado
mis ansias de espera
espera de tus ojos
manos morenas
en mi tierna cabellera
Tú creador,
que juegas con mis delirios durante noches de vigilia
permíteme ingresar a su archivo de dormida
para sentir lo que sería
mecerme en sus brazos oír su alegría
Por Cecilia Chávez
Más y más
¿Cuánto más ?
Holocaustos de vidas,
holocaustos de Libertad,
holocaustos de mentes
criticas para pensar.
La historia en el tiempo
se repiten y abundan
cortinas para engañar,
nos confunden las nubes
de colores vestidas
inocentes no vemos
no existe piedad.
Verdades, mentiras,
holocaustos acaban
destruyen la humanidad,
¿Cuánto más, me pregunto?
¿Cuándo la venda caerá?
Holocausto del pueblo,
holocausto a su esencia
a su pura verdad,
Ilusos poderes
creen que venciendo estarán,
destinados y ciegos
junto a su pueblo
de rodillas rendidos
verán todo acabar.
¡Holocausto maldito!
Libertad
de mis sueños.
Libertad
de mi alma.
Libertad
de mi historia
Libertad
de los genes
que no puedo negar.
No existe holocausto
que saqueé
mi derecho a pensar,
eso es sagrado,
_ ¡No lo permito!
eso no lo robarás
se queda conmigo
no se extinguirá.
SIN DIOS NI RASTRO
Por Toni García
Quisimos burlar la noche
pero traías la luna atravesada
de abierto costado a cerrojo
terca, cual feroz clavario.
Sólo saben llorar de ocaso
los girasoles a la luz que no los besa,
tu mano acercándose a mi boca
para que no grite
para que no llame la muerte
mi voz de tragedia
Sin dios ni rastro
bajo estrellas oxidadas, tu mirada, tu sonrisa,
y tu caricia en mi mejilla dicen adiós
y yo en mi lucha, en la trinchera quimera
de llegar al alba, que sabemos no verás,
a mi paso de furia, giran las sombras la cara,
y en un último esfuerzo me amas,
sin lágrimas.
Se acerca nuestra primera Navidad
que sabemos
juntos, jamás veremos.
Poemas de la poeta israelí Tsipi Sharoor
Traducción del hebreo al inglés Karen Alkalay-Gut
Traducción del inglés al español por Jorge Daniel Tejeda Palafox
El pañuelo de geranio de mi abuela
Cuando era niña me preguntaba cuál era el color del cabello de mi abuela,
si una melena de rizos la tuviera/o lacia,
si dorado era su cabello, o negro/
o tiene gris salpicado por todas partes.
En todos sus días y noches no se quitó el velo que cubría su cabeza-
capturado en un pañuelo descolorido,
bordado con flores de geranio,
como su alma tal como la Torá le impone.
Al mediodía mi abuela se acostó a descansar como solía hacerlo,
me deslicé lentamente hacia su habitación y me desvié un poco.
La cubierta prohibida de su cabeza.
Para mi sorpresa,
se reveló que su cabello era de un rojo intenso.
Ardiendo en los soportes del pañuelo.
Recuerdo el toque de su cabello
espeso, áspero, brillante y abundante.
Y toda esta belleza
aprisionó a mi abuela dentro del pañuelo de geranio.
Despierta asustada, agarrándome las yemas de los dedos,
manteniéndome alejada de ella. Hija mía,
cuando seas grande
tú también te cubrirás la cabeza, dice.
La profecía de mi abuela no se cumplió.
Me dejé crecer el pelo, visible, salvaje y descarado
moviéndose con el viento.
La pequeña Scheherazade
El sol rompe desde dentro de la sal
y un niño nos dice de una hafla beduina
en un campamento secreto.
Y no vi
mas que una pequeña Scheherazade
que esparce sus historias
y hace magia un momento
del desierto de esta tierra
para ti
Leda
Ella tiene un hábito,
deja una ventana abierta para los pájaros.
Quizás venga un cisne blanco de cuello largo.
Y ella pondrá un huevo de cisne en sus brazos.
Leda sueña de noche sueños blancos de cuello largo.
Y por la noche – fría y oscura
Zeus ve los sufrimientos de Leda.
Él extiende sus alas
y un cisne viene a ella de cuello largo
y alas plateadas.
Decisivo,
todas las noches viene
hasta el final
de la temporada de puesta.
Eva
“En el sufrimiento darás a luz tus hijos
y tu deseo será para tu marido,
y él se enseñoreará de ti…” le dijo.
“Y se llamó Eva... porque ella era la madre de toda la vida..."
Desde el principio fue huérfana
sin hermana ni amiga.
El comienzo de todo.
Y arriba Dios gobernó
y debajo de la serpiente imprudente
y en el jardín la gobierna su consorte
y ella es la madre de toda la vida,
porque aún no ha conocido el duelo.
El regalo de Pandora
“A excepción de las conversaciones de mujeres, son sueños
que mantienen al mundo en su rumbo” (José Saramago)
Cuidado con los regalos de los dioses.
Para Pandora que al principio
no fue más que un don y una locura de Dios,
su música es más dulce que la miel,
y sus sueños eran de su curiosidad
hasta que una fina grieta en la caja de la colmena
completó la creación de los dioses en agonías.
Todo Egipto es de ella
Las pirámides colapsan
en la cabeza de Cleopatra
y un semental toro
es el dios infestuoso.
Y cuando entre sus muslos
él es una oveja balante
en las noches,
todo Egipto es de ella
Yo soy el sacrificio
Soy la costra de leche de mi madre
y el beso de la fe
yo soy el amor,
la unión del muslo caliente.
yo soy el fuego
y agua restringida,
yo soy la mezuzá de la puerta
y la respiracion y la pendiente.
Yo soy el Akeda*
el humo
y el lamento.
*Akeda se refiere a la historia bíblica del Sacrificio de Isaac.
Aunque el significado literal del Akeda (en hebreo: vinculante) enfatiza el hecho de que Isaac no fue sacrificado; en la tradición occidental llegó a ser conocido como el Sacrificio de Isaac ya que presagiaba la Crucifixión.
Me abrieron un corazón
Me abrieron un corazón
veinticinco pasillos de ancho
y mi madre emerge de ellos con
esclavos y sirvientas.
Y mi padre de ellos saca su locura,
instalando la soledad para sí mismo,
y les extraigo la miel y el alquitrán.
Mis madres y mis padres me abrieron un corazón.
y lanzaron en él arterias usadas,
un otro mundo goteando,
un pedigrí.
Y no me importa que soy un hoyo de pozo–
que nunca pierde una gota
que nunca se pierde,
y les quita la pérdida
y les da la orfandad.
Sobre la autora:
· Tsipi Sharoor es una reconocida escritora, poetisa, editora y educadora israelí. Hasta el momento, ha publicado 38 libros de prosa y poesía, para adultos y jóvenes. Fue editora de "Moznaim", publicación mensual literaria de la Asociación de Escritores Hebreos en Israel. Tsipi Ofrece cursos de escritura creativa en prosa y poesía. Tsipi era miembro de la junta directiva de la Segunda Autoridad de Radio y Televisión. También fue presidenta del Comité para el Desarrollo de las Comunicaciones en nombre de la segunda Autoridad de Radio y Televisión.
Sobre el traductor:
· Jorge Daniel Tejeda Palafox nació el 03 de enero de 1993 en la ciudad de Xalapa, Veracruz. Finalizó la licenciatura de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Ives de su natal Xalapa, obteniendo su titulación el 04 de octubre de 2019. Es fundador de su propia marca empresarial que lleva su nombre de pila, Jorge Daniel con su registro legal enfocada en la capacitación, formación y educación empresarial y académica. También, se desempeña como articulista, periodista, traductor bilingüe, Community Manager, conferenciante y empresario autónomo.
Ruta de cuerda
Ruta de cuerda
que concuerda y atraca
curva quiebra
de quinta manzana,
asta de tierra
rota roca sangras
sin oquedad de taranto,
al aire el alma.
Lloro de córneas,
Desprende ni iris en nauseas.
Fuimos tú y yo,
silueta de guitarra
sin dólar de buitre
ni pico por navaja.
Ruta duerme de cuerdas
mástil lecho de plata.
En venta Locura cuerda,
Cicuta Moneda de lata
Toni García Villanueva.
CUERPO DE PARNÉ
Noche de huecos plenos
y alma vacía,
de dolor en carne
de carmín en sonrisa
Cuerpo de parné
y un sueño en la cornisa
besa cáliz de hiel
la magnética banda de una Visa,
imita un perfume de Chanel
su última lágrima de niña
otro hoy igual que ayer
de presa golondrina,
cárcel de barrotes de papel
sucia llave la propina en la mesilla.
Toni García Villanueva.
Sin sentido
Leí tus labios
y sentí acordes
en aullidos,
felinos los sentidos
arrebatando
los poros,
las membranas
que conforman
las dunas de mi piel,
erizándose mis sueños
en fantasías por nacer.
Leí tus labios
tatuándome entre besos
con sangre de tu sangre
atravesando el alma
qué nadie supo ver.
Leí tus labios
me convertí en ovillo
fui tu punto fino
anudada a tu espalda
enredada a tus sentidos
el secreto, la basta
escondida a su perder.
Leí tus labios
tejí tus besos y los míos
en encaje reprimido
encontrando sin sentido
los anhelos
que no pudiste ver.
Cecilia Chávez
Lamento
El lamento del ser humano, es estar codiciando
sin querer ser descubierto, en la mañana clara
de un día tan lleno de gente en un mundo que nunca se detiene.
El lamento del ser humano es ser orgulloso
y no dar a conocer sus verdaderos sentimientos
aunque la luna se apague ellos prefieren estar ciegos.
El lamento del ser humano es ser egoísta
y no darse cuenta que su oro ahora es odio
porque la plata es pasajera
y el símbolo de la vida, una hoja volando en el aire
del amor verdadero de un ángel
amando cantar en el infinito, porque el llorar
es muy triste pero más alegre
el deseo por verte en mis recuerdos,
sin pena, y con miles de emociones
que mi mente llena en el vacío de tu más grande ausencia.
El lamento del ser humano es no amar lo infinito
Cuando las manos del destino me hablan al oído,
con tan solo dos palabras cuando los mundos
se visitan en las noches, tan gigantes que mis ojos
ni los tocan y mis manos ni las ven
por eso a ti te amo para darte el beso que libere mi eterno amanecer.
Elizabeth Pérez Arones.
En tierra de nadie
En tierra de nadie,
almas salvajes,
civilizadas pensadoras
en tierra de nadie...
No son lamentos ni risas,
no son torturas
ni almas aladas
en la oscuridad de la penumbra.
Nada es lo que postulan
en tierra de nadie,
porque nadie es todo,
porque nuestro todo
puede que sea nadie.
Un espejismo, un reflejo
de lo que dijo aquel libro.
Lo que sé, lo que se sabe,
es que tierra de nadie
es mucho más de lo que se sabe.
La Dama Oscura
su belleza
El tono de su notable belleza provoca que me olvide de inicio abundante desilusión que vuela deprisa por todo el mundo, mis días se inundan de colores al escucharla, su sensual voz trasmite la motivación que por momentos se desliza de mi mente. Su decoración de expresión verbal estimula auténtica inspiración misma que es como la arribada de un espléndido arcoíris que pretende engalanar aquel valle después que han recorrido torrenciales de lágrimas por la piel de sus nostálgicas mejillas. Llegó después de haberse marchado el crepúsculo, ella traía entre su hermosura, fragancia, así como lo hacen las flores de primavera, que el jardín recibe con eminente regocijo, aunque su estancia fue efímera pero lo suficiente como para comprender, los numerosos encantos que tenemos en nuestro entorno y que en limitadas ocasiones nos damos el permiso de abrazar con enérgica libertad.
La bella y erótica durmiente
Príncipe,
no espero ese beso insípido
e inmaculado
que narran en mi cuento.
He despertado al placer
de mis propios labios;
al calor del sueño
y al tacto aventurero de mis dedos
crepitando
en cada tramo de mi cuerpo.
En mi lecho,
adormecida,
la imaginación jugaba
bajo mis párpados
y otros amores exploraban mis labios
en cuentos ajenos.
No creas la historia
en la que nos metieron
mientras me besabas,
me hice la dormida
para no herir tus sentimientos.
Lamento,
si digo cosas
que no deseas escuchar,
pero,
mis despertares
son evocados por el placer de vivir
y no por besos de príncipes,
ni forasteros
con ansias de reinos.
En mis sueños
he despertado
a la caricia vehemente
de mi propio encuentro.
Por Natalia Esquivel
mis demonios
Y salieron mis demonios,
esos que estaban guardados
esos que esperaban pacientes
ante mi llamada.
Enormes, poderosos
y más peligrosos que nunca.
El mundo tembló,
los infiernos calentaron mi piel
y la protegieron del frío
mientras helaban
la sangre de mis enemigos.
Lo advertí,
ni a mí, ni a los míos,
se debe herir.
Nadie sabe quién me guarda,
quien protege mi llama,
nadie controla mi calma,
mi ira o el huracán
que en mi interior se desata.
Nadie conoce donde se halla
la línea que jamás se traspasa.
Por eso, no miréis mis ojos,
mirad a mi espalda,
mirad los demonios
que os devorarán en silencio
saboreando mi venganza.
UN PASO A LA VEZ
Una pisada toma tiempo.
La presión de ideas y emociones,
sensación de ahogarme en mi pecho.
Dos ríos recorren mis mejillas
uno para cada mano que,
al rozar la piel, le envejece más.
Tres veces he pensado huir,
salir sin explicaciones.
Al fin de cuenta,
los dramas ocurren en la cabeza.
Un paso a la vez.
Cuatro viven esta situación.
La niña pérdida en lo que duele,
El Salvador que llevó sus heridas,
El Padre que le ha guardado la vida
y El Espíritu que le ha consolado.
Correr mientras alrededor todo sigue.
Cinco son las miradas que juzgan,
cinco las veces que he tragado grueso
mientras escucho romperme adentro.
Ahora es mucho.
No quiero seguir contando
cuánto he limpiado flujos de mi nariz,
ni las veces que me acerco en silencio,
ni la indiferencia; que te es natural.
Dirás nunca darte cuenta,
excusando tu libertad sobretodo.
Sobre Él, sobre amar. Solo a ti.
Se pierde.
Este escrito hace cuatro versículos
dejó de escuchar a tres oradores,
mientras se humedecían mis dos ojos
y soltaba mi único lápiz, para no llorar más
Por Mishell A. Gómez